El Real Monasterio perteneció a la Orden de Malta y está constituido por diferentes cuerpos. Su planta es ligeramente rectangular, con un pequeño patio abierto al exterior por el Este. El elemento más característico del conjunto es la espadaña.
El acceso al convento se realiza por una portada bajo arco de medio punto con la dovela clave enseñándonos la Cruz de Malta, motivo este que se repite en varios lugares.
El Monasterio enlaza con la villa mediante el puente "Terrazos", sobre el río del mismo nombre. Realizado en piedra en 1762, sustituyó a otro anterior en madera.